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sábado, 28 de noviembre de 2020

LA URGENCIA DEL CAMBIO

En medio de las preocupaciones causadas por los efectos de los aguaceros atravesados de todos los noviembres, pasó casi inadvertida la nueva crisis en el gabinete distrital, cuando, sin muchas explicaciones, se conoció a través de las redes, que el Secretario de Hacienda había renunciado o no continuaba más al frente de este despacho.

 

Debió extrañarnos esta situación, toda vez que este funcionario había sido seleccionado dentro del cacareado y exhaustivo proceso meritocrático, de comienzos de gobierno y, es un hecho reconocido por toda la comunidad académica, que se trata de un individuo cabal, y con grandes méritos o pergaminos, como dice nuestro amigo. Economista con maestría, doctorado y una larga hoja de vida y trayectoria, educando a los profesionales del futuro de nuestra ciudad. No se entiende entonces la súbita salida del funcionario, a no ser que se trate de otra de las, cada vez más normales trastadas, que ocurren por estos días en el Palacio de la Aduana.

 

Casi sin querer queriendo nos enteramos, que todo inició con la venida del presidente de la república, quien, ante los gritos de socorro de la ciudadanía y, la poca o nula gestión del distrito frente al recurrente fenómeno tropical, se presentó ante las puertas de la ciudad con su equipo y asumió el control y las gestiones pertinentes. Todo marchaba a pedir de boca, hasta cuando uno de los encopetados andinos pidió que le mostraran la ejecución presupuestal del año. Ahí fue Troya.

 

Cuando todos esperaban ver una altísima inversión, teniendo en cuenta que los 1.2 billones que antes se robaban, este año estaban en buenas manos, resultó que no había tales inversiones y muy al contrario, estas eran tan bajas estando ya en el mes 11 del año, que no pasaban del 70%. Una rápida mirada a los cuadros correspondientes, dejó ver que había dependencias con realizaciones cercanas al 0%, mientras que las demás solo acumulaban gastos de funcionamiento, representados en contratación de personal por órdenes de prestación de servicios.

 

Parece que ante los cuestionamientos de los cachacales, el alcalde se desmontó por las orejas, entró en cólera como es normal en el, y se desquitó con el secretario de hacienda, cuya continuidad en el cargo quedó inmediatamente en entredicho. Nadie comprende como se le piden cuentas de inversiones a un funcionario cuya responsabilidad no es precisamente la de realizar las inversiones. Tampoco se comprende como se responsabiliza a otros funcionarios, cuando es bien sabido que, desde el mismo comienzo, el alcalde les retiró las autorizaciones de gastos e inversiones a casi todas las dependencias y las concentró en una sola. 

 

Ahora quizá comiencen a comprender algunas personas porque la ciudad presenta tal estado de postración, por falta de las inversiones mínimas necesarias para resolver problemas urgentes. Ahora quizá comprendan por qué los efectos del fuerte invierno, se vieron agravados, al no haberse realizado la limpieza anual de imbornales, alcantarillas y canales. Ahora quizá comprenderán por qué varios funcionarios de carrera, con gran experiencia, abandonaron rápidamente el barco, al comprobar que su gestión era improductiva, si no se hacían las inversiones urgentes que requería la ciudad.

 

Una ciudad no se gobierna con malas crianzas ni con disputas virtuales en redes, y mucho menos con concursos de simpatía, donde el ganador será el que logre mas likes. Una ciudad no se gobierna con gritos e insultos. Muy al contrario, se gobierna propiciando un clima laboral productivo, donde los funcionarios encuentren realizaciones personales y profesionales, buenos planes, buenos programas y proyectos y con un preciso control de las variables clave, donde inversiones, gastos, indicadores, calidad y excelencia, son el vocabulario del día a día. 

 

Es lamentable que poco a poco, y por diversas razones, el otrora gabinete de lujo esté prácticamente a punto de desaparecer. Unos cuestionados, otros cansados del maltrato y los demás desilusionados. Lo cierto es que, ya son más de 10 los que han partido y que  se han  reemplazado silenciosamente o por personajes venidos de otras regiones a quienes si acaso se les conoce el patrocinador.

 

Es igualmente lamentable que en estos momentos ya estén llegando personajes de la capital de la república, comisionados directamente por la presidencia a encargarse de tratar de emparapetar la cosa. Como dicen por ahí: esto si es el apaga y vamos. 

 

Esto es lo que hace tan obligatorio el iniciar a la mayor brevedad, las acciones necesarias para un cambio de fondo. Como dicen que decía el maestro Einstein: Si siempre haces lo mismo, lo más seguro es que nunca obtengas nada nuevo.


https://es.wikipedia.org/wiki/Rodolfo_Diaz_Wright 

sábado, 21 de noviembre de 2020

TORMENTAS NOVEMBRINAS

Rayos y centellas cayeron sobre la ciudad de Cartagena, en la semana que termina y no precisamente debido a los coletazos de las tormentas, que todos los años por estos tiempos nos visitan y que de paso desnudan la ineficacia de nuestros sistemas de drenajes, de nuestros servicios públicos y de nuestra incapacidad histórica para acometer los proyectos de “raca mandaca” que necesita la ciudad.

 

Estamos tan acostumbrados a que nunca se haga nada y al aplazamiento eterno, que ahora no solamente nos quedamos felices viendo como la inundación acaba con todo, sino que, además, nos volvimos expertos en justificar lo injustificable y en encontrarle razones al abandono, la inoperancia y la desidia,  y sentados y sonrientes, vemos como el comején de la ruina acaba con lo poquito que queda, mientras los vecinos inauguran resplandecientes y colosales obras para el desarrollo. Como dice Robin Sharma: “no podemos segur siendo audaces en las intenciones e insignificantes en las acciones”

 

Pero bueno, los rayos y centellas cayeron fue cuando alguien propuso hacer algo diferente. Cuando alguien dijo: ya está bueno, porque no utilizamos las herramientas que nos da la democracia, la constitución y la ley, para cuando encontramos que nos equivocamos y elegimos a la persona inadecuada y de la que no podemos esperar nada diferente, a una falta estructural de competencias, una gran vocación para el caos administrativo y un talento innato, para sembrar el odio, generar división y profundizar los resentimientos.

 

Tengo que admitir que me sorprendió mucho, la cantidad de conciudadanos que de inmediato se pronunciaron seria y honestamente, sobre la urgencia de acoger las alternativas que nos brinda la ley, para iniciar un cambio efectivo y definitivo. Líderes de todos los sectores de la ciudad, se apresuraron a ponerse a disposición de la propuesta y rápidamente los WhatsApp, las páginas, las redes, los columnistas y los medios locales y nacionales convirtieron una sencilla propuesta de un blog desconocido de provincia, en noticia de todo el país. 

 

Obviamente, no podían faltar los rayos y centellas de los defensores del statu quo, de la continuidad, del deje así, del no se meta en lo que no le importa, o peor aun, defensores de la ineficacia, de la mediocridad y de lo indebido. Las gavillas de las bodegas arrancaron con lo mejor de su repertorio florido, en el que la columna vertebral la integran tres conceptos sospechosos y equívocos: Todos somos malandrines, todos estamos viudos de poder y todos estamos contra el gobierno, porque no nos han dado una OPS. Generalizaciones infundadas y pueriles, que solo muestran a las claras, el terror que les produce la sola posibilidad de quedarse sin poder y sin OPS.

 

Escuchamos también opiniones bien estructuradas, puntos de vista filosóficos y sesudos, que ayudan a aclarar el panorama y le dan un buen aporte conceptual al debate. Por último y, lógicamente no podían faltar, aparecieron los oportunistas de todos los pelambres, cubriendo con flores el borde del abismo, para que sigamos caminando tranquilamente y nos despeñemos una y otra vez, en el precipicio de sus mentiras. Camaleones con un color para cada ocasión, pontifican sobre lo divino y lo humano y pretenden, ingenuamente, que no tenemos memoria y que sus manipulaciones los volverán a colocar en la línea de partida, donde realizarán lo que mejor saben hacer: pescar en rio revuelto. Fungen de tibios y conciliadores y duermen con un ojo, mientras con el otro buscan a quien ofrecerle sus amores a la espera del anhelado guiño.

 

Parafraseando al expresidente Obama, el actual alcalde nunca ha mostrado un verdadero interés por asumir su cargo con seriedad, su compromiso histórico con la ciudadanía, con las instituciones, con la democracia y con las responsabilidades puestas a su cuidado. Nunca ha usado el inmenso poder que le conferimos para trabajar por la ciudad, simplemente porque no puede. Para el su cargo no es más que un reality show, donde mostrar su personalidad histriónica. Es por esto y nada más, que proponemos la reflexión profunda y la necesidad urgente del cambio.

 

No hay que olvidar que la crisálida que se resiste a cambiar, nunca sabrá lo bueno que es volar.

 

P.D. Preocupante la situación que atraviesa la ciudad, a consecuencia de inundaciones producidas por una combinación de fenómenos naturales y humanos. La solidaridad y ayuda a los damnificados debe ser la máxima prioridad en este momento.


https://es.wikipedia.org/wiki/Rodolfo_Diaz_Wright

domingo, 15 de noviembre de 2020

CARTAGENA CORRIGE

La democracia norteamericana, una de las más viejas del mundo moderno, está de fiesta, riéndose y burlándose entre dientes del mono Trump, quien, con el gallinazo de la derrota, encaramado en su hombro, no entiende como ciudadanos comunes y corrientes se le enfrentaron, armados tan solo de voluntad y deseos de corregir lo que consideraron fue una pésima decisión en su momento.

 

De nada le valió su poder político ni económico, para parar la hecatombe que se le venía encima y, voto a voto, condado a condado, el pueblo le reafirmó que se cansó de sus arrebatos, de su prepotencia, del discurso disociador y excluyente de un hombre con talento para el odio, que  es incapaz de reconocer o identificarse con los sentimientos y las necesidades de otras personas y que usa la mentira para apuntalar su odio y su despotismo hacia quienes, en su narcisismo, considera inferiores: "la abrumadora cantidad de crímenes violentos en nuestras principales ciudades es obra de negros e hispanos", decía engreido y altivo, poniendo la misma boca de pato  que ponían las jóvenes al tomarse una selfie.

 

Los propios medios de comunicación de ese país, le dieron un verdadero golpe de autoridad y, en una decisión controversial pero histórica y definitiva, le cerraron sus micrófonos, cuando pretendía incendiar el país, convocando a la desobediencia y el caos, utilizando la calumnia y la mentira en favor de sus  pretensiones y caprichos. 

 

Buen ejemplo el de los norteamericanos, que deberíamos seguir quienes, en otras regiones del mundo, como la Heroica, nos descachamos eligiendo personajes que, a pesar del apoyo y la paciencia de la ciudadanía, finalmente salieron con nada, no tienen los “pergaminos”, incompetentes, sin planes ni programas y con una catadura atrabiliaria y pendenciera, que dista mucho de lo que  debe ser y parecer un verdadero alcalde.

 

En mi más reciente columna, aclaraba que, afortunadamente nuestra democracia, permite corregir estos errores electorales, al menos para mandatarios locales, tales como alcaldes y gobernadores, antes de que las cosas empeoren o el daño sea irreparable. La reacción no se hizo esperar y muchos amigos, preocupados por nuestro futuro, me han pedido, no solo que explique en que consiste el proceso, sino que lidere y tramite la revocatoria del actual burgomaestre de Cartagena, ante las autoridades correspondientes.

 

Quiero informarle a todos, que gustosamente acepto su petición y que a partir de hoy iniciamos la conformación del comité de la revocatoria, que se llamará CARTAGENA CORRIGE y para el cual ya se han vinculado un importante grupo de amigos de la ciudad. De paso les explico que la revocatoria  del mandato es un derecho político, contenido en la Ley 134 de 1994, por medio de la cual los ciudadanos pueden dar por terminado el mandato que le han conferido a un gobernador o a un alcalde, cuando exista insatisfacción general de la ciudadanía frente a la labor del mandatario, o se presente incumplimiento del Programa de Gobierno.

 

Es claro que en el actual caso, no solo no se ha cumplido el presunto Programa de Gobierno, en cuanto a acabar con la corrupción y la pobreza, sino que además, hay insatisfación por la desastrosa labor del alcalde, en los aspectos de gestión, planeación y ejecución del Plan de Desarrollo, y por el lamentable estado en que se encuentra la ciudad: inseguridad, insalubridad, descontrol en todos los sectores, inundaciones, la malla vial destruida, bloqueos y protestas, todo enmarcado en un comportamiento y unas acciones grotescas, indecorosas y muy  alejadas de lo que se esperaría de la primera autoridad de la ciudad.

 

La cereza que le faltaba al postre, se la puso el mismo alcalde, en reciente presentación pública en la que afirmó, en forma abusiva e insultante, que los profesionales cartageneros no reunen las condiciones, ni tienen los pergaminos, para asumir cargos de responsabilidad en la administración. Que para los cartageneros están disponibles solo los cargos de obrero.

Muy seguramente estos altos cargos, estarán reservados para las estrellas recomendadas de las familias Araujo o Char, quienes parece son siempre bienvenidos. 

 

Le informamos alcalde, que a partir de hoy, para nosotros será un  honor,  trabajar como obreros, sin descanso ni dominicales, en los trámites que nos lleven finalmente a lograr la revocatoria de su mandato y que lo devuelvan a su trabajo de buitre gringo con pergaminos, de donde nunca debió salir.

 

El 2 de enero de 2021, inscribiremos el comité, ante la registraduría, e iniciaremos la recolección de las 34100 firmas. El Dalai Lama siempre la ha tenido clara: “Cuando te das cuenta de que has cometido un error, toma medidas inmediatas para corregirlo”.


https://es.wikipedia.org/wiki/Rodolfo_Diaz_Wright

martes, 3 de noviembre de 2020

LA FIESTA DE LA MEDIOCRIDAD


Poco a poco los cartageneros nos hundimos irremediablemente en el océano del desencanto. Las telarañas de nuestra memoria son cada vez más densas y las cucarachas del olvido han reducido a escombros, los recuerdos de nuestras glorias pasadas. La mediocridad es nuestro símbolo distintivo y, cada vez cobra más vigencia, la frase lapidaria del padre Pierre Augustin Caron de Beaumarchais: “Con ser mediocre y saber arrastrarte llegas a cualquier parte”.

 

Hace apenas unos días, nuestro principal periódico local, festejaba con bombos y platillos el triunfo de la improvisación y el oportunismo. En primera plana y con una inocultable alegría, el panfleto dibujaba el tamaño de nuestras desgracias: El alcalde, quien pensó inicialmente que no aguantaba ni un mes en su cargo, acababa de completar nueve largos y conflitivos meses, sin ser echado. Imagínense tremendo triunfo.

 

Hasta donde hemos penetrado, en ese camino miserable de la falta de vergüenza, de la nula capacidad de sindéresis, del desprestigio y del poco respeto por una ciudadanía ingenua y escaldada, por su infortunio histórico y recurrente. El alcalde, con cara de novio feliz, aparecía contento y sonriente, cual boxeador que acaba de finalizar el combate, apaleado pero dichoso de haber resistido los doce asaltos.  Pero, si sentimos pena ajena por nuestro alcalde, mucho más grande fue el desconcierto, ante el descache de nuestro otrora serio y responsable periódico. Que eso sea lo único a destacar, después de nueve meses de diatribas, retractaciones, borrones y embarradas, es una clara muestra de lo mal que andamos.

 

Queda claro entonces, que en los planes del candidato Dau, no estaba el ganar la alcaldía de Cartagena y mucho menos ejercer ese complejo cargo, el cual, ni en el más remoto de sus pensamientos, estaba preparado para desempeñar. Casi todos recordamos que apareció de la noche a la mañana, con su cartapacio de cuentos y chismes de palito de caucho, anunciando denuncias y castigos, hablando de todos y contra todos, sabiendo que este es un electorado, en su mayoría,  cuasi ignorante, sugestionable y proclive a apoyar propuestas escandalosas, de poco contenido programático, pero respaldadas por charlatanes y vocingleros profesionales.

 

Le sonó la flauta y, muy rapidamente, demostró que era un “metemonos”, que después de matar al tigre le tenía miedo al cuero, que no sabía “por donde iba tabla”, y que, como el mismo festeja hoy día, creía que no iba a durar ni un mes.  Eso no lo pensaban sus enemigos, como hoy anuncia sin ruborizarse. Eso lo pensaba el, ante la certeza de su incapacidad para asumir una responsabilidad que le cayó de chiripas, que nunca imaginó que tendría que enfrentar, a no ser en una ciudad famosa por sus descalabros, a la hora de elegir a sus dirigentes. 

 

Hoy todavía desconcertado, no sabe como va a salir de la camisa de once varas en que está metido y su única estrategia es seguir alimentando el circo de tres pistas en el que indistintamente  ejerce roles de titiritero, de payaso o de ventrílocuo incorregible. Hace poco se disfrazó, para demostrar que añora sus tiempos de candidato y las trifulcas verbales con sus contrincantes, síntoma inequívoco de que no se encuentra cómodo en su actual papel  y que su pugnacidad continuará,  con la esperanza de que una autoridad con pantalones lo saque a sombrerazos, o que la ciudadanía reaccione y le pida la bola, en una revocatoria histórica.

 

La reina isabel, ante la solicitud de los conservadores ingleses, de propinarle un golpe de estado al Laborista Harold Wilson, acusado de ser espía de la KGB, dizque para salvar la democracia, los sacó a empellones de su sala de recibo con una respuesta histórica: “si quieren democracia, déjenlo que termine su período, para el cual fue elegido democráticamente, y luego elijan uno mejor.” Wilson, no solo continuó su período, sino que solo se marchó,  cuando le dio la gana.

 

Afortunadamente en nuestra democracia no hay que esperar que termine el período para reemplazar al mal elegido: tan solo hay que soportar un año y recoger,  en este caso, 34100 firmas, para solicitar su revocatoria. Ya casi.

 

https://es.wikipedia.org/wiki/Rodolfo_Diaz_Wright